MI SOLUCIÓN PARA EL DOMINGO:
Mientras camino por la calle, una duda acecha mi mente.
Justo al salir de mi casa, me los topé. Yo agaché la cabeza, fingiendo no verles y bajé la banqueta, con la vana esperanza de que todo terminara ahí. Pero no fué así. Acada cuadra que daba, en cada lugar que volteara ahí estaban. Y cada vez se volvían más reales y tangibles, al grado que los veía caminar junto a mí. Playeras rojas, azules, amarillas y naranjas trataban de llamar mi atención y mi confianza, aunque a cada momento, me hacían desconfiar más.
TRAté de ignorarlos, pero incluso en mi casa los encontré: al alzar la bocina del teléfono una voz salida de una grabación me decía por quien votar. Quise saber que hacer para parar este acoso, pero al ver las sonrisas de esos rostros de plástico que me miran (ellos creen que amablemente) con sus caras de cabrones, distingo al fondo de sus ojos el desdén de quien sabe que, no importa a quien elija, alguno de ellos se llevará el pastel. Y no importa (en verdad no importa, doscientoscincuentamilésima parte de los votantes) si no quieres votar, que con uno que vote basta y sobra.
Se acerca el domingo, y las fracciones de cada bando se extremizan, buscando enrte su mundo de pactos y conveniencias aquella que les brinde más beneficios.
Y yo, confundida y desesperada sopeso mis opciones:
a) Si voto, no hay partido bueno. Todos los partidos son una &%$/& que sólo respera sus intereses, y que me va a ver la cara.
b) Si no voto, ni quien se entere, al fin no faltará el que vote y elija por mi.
c) Si anulo mi voto, es casi lo mismo que no votar.
¿Qué hacer entonces?
Bueno, me doy. El juego está perdido. Pero al menos, no será por mi culpa. Yo no quiero que ninguno llegue al poder, pero alguno será menos peor que los demás. Ése es facil de distingir: casi seguro que perderá. Y no forma parte de ningín partido mayoritario. Así que si voto por éste las cosas no empeorarán, y si de pura casualidad obtiene algo de poder los demás irían en contra de él y el de ellos, creando un poco de equilibrio. Buajajajaja!!!! Perderé de todas formas, pero no facilmente!!!
Este 5 de Julio:
VOTA POR QUIEN VAYA A PERDER
Y así ni pedo, al fin que el que te robe no lo habrás elegido tú.
Justo al salir de mi casa, me los topé. Yo agaché la cabeza, fingiendo no verles y bajé la banqueta, con la vana esperanza de que todo terminara ahí. Pero no fué así. Acada cuadra que daba, en cada lugar que volteara ahí estaban. Y cada vez se volvían más reales y tangibles, al grado que los veía caminar junto a mí. Playeras rojas, azules, amarillas y naranjas trataban de llamar mi atención y mi confianza, aunque a cada momento, me hacían desconfiar más.
TRAté de ignorarlos, pero incluso en mi casa los encontré: al alzar la bocina del teléfono una voz salida de una grabación me decía por quien votar. Quise saber que hacer para parar este acoso, pero al ver las sonrisas de esos rostros de plástico que me miran (ellos creen que amablemente) con sus caras de cabrones, distingo al fondo de sus ojos el desdén de quien sabe que, no importa a quien elija, alguno de ellos se llevará el pastel. Y no importa (en verdad no importa, doscientoscincuentamilésima parte de los votantes) si no quieres votar, que con uno que vote basta y sobra.
Se acerca el domingo, y las fracciones de cada bando se extremizan, buscando enrte su mundo de pactos y conveniencias aquella que les brinde más beneficios.
Y yo, confundida y desesperada sopeso mis opciones:
a) Si voto, no hay partido bueno. Todos los partidos son una &%$/& que sólo respera sus intereses, y que me va a ver la cara.
b) Si no voto, ni quien se entere, al fin no faltará el que vote y elija por mi.
c) Si anulo mi voto, es casi lo mismo que no votar.
¿Qué hacer entonces?
Bueno, me doy. El juego está perdido. Pero al menos, no será por mi culpa. Yo no quiero que ninguno llegue al poder, pero alguno será menos peor que los demás. Ése es facil de distingir: casi seguro que perderá. Y no forma parte de ningín partido mayoritario. Así que si voto por éste las cosas no empeorarán, y si de pura casualidad obtiene algo de poder los demás irían en contra de él y el de ellos, creando un poco de equilibrio. Buajajajaja!!!! Perderé de todas formas, pero no facilmente!!!
Este 5 de Julio:
VOTA POR QUIEN VAYA A PERDER
Y así ni pedo, al fin que el que te robe no lo habrás elegido tú.
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