Influenza en el DF

Lo siento. Aunque es una muy mala caricatura no lo puede resistir. Al fin y al cabo en la tele nos bombardean con información inquietante porque dicen que no es de preocuparse. Y en internet parece haberse vuelto evidente el pánico de la pandemia.
Cómo se la juegan los virus. Ayer mismo, en la escuela, tocábamos el tema del VIH. Virus que mutan volviéndose fuertes, ineludibles. Como el catarro.
Y ahora viene esto de la "influenza porcina".
Hace ya tiempo que no había una histeria así. Cuando pasó lo del SARS todo el mundo se puso paranoico. Las señoras salían de casa con tapabocas. Pero al fin y al cabo lo principal sucedía a miles de kilómetros de casa, en un mundo aparte que sólo conocíamos en la televisión.
Ahora, las escuelas están cerradas y millones de alumnos, incluida yo, nos refugiamos en casa mientras la locura aflora en la ciudad. Mi hermano, se preocupó porque llava una semana con gripa. "Si tuvieras influenza ya te habrías muerto"- le digo para que se calme.
Pero es inminente. Gente va en manadas a los hospitales a pedir vacunas. No lo sé. Creo que irse a asomar a un hospital cuando no se tiene nada que hacer es tentar a a suerte, buscar un contagio.
Y seguro son miles las personas que no se presentaron a trabajar. Según los reportes las personas entre 20 y 40 años son las más vulnerables. Menuda mierda. Ahora resulta que las personas supuestamente con más salud más facilmente se pueden morir.
El mundo está de cabeza. Ya lo sabía yo. Es el inicio de otro Apocalipsis.
¿Y acaso ganamos algo? Yo sí. Hoy tenía examen

PD.: No sé que pasa en este mundo que toda la semana me ha retado a que lo insulte. O soy yo, pero aún me falta despotricar contra el tren suburbano, al cual traigo ganas desde que se abrió.